Prueba del Toyota Auris Hybrid

La versión más ecológica del compacto japonés destaca por su funcionamiento en uso urbano.

Con la renovación del Toyota Auris, no podía faltar en la gama la versión híbrida, que sigue siendo muy recomendable para circular por un entorno urbano gracias a su bajo consumo y a su suavidad de marcha. Respecto al anterior modelo, la parte mecánica queda inalterada.

Si lo comparamos con un Auris normal, los cambios de esta versión tan especial son prácticamente imperceptibles. Tan sólo se diferencia por el logo de Toyota adornado con unos destellos azulados y un par de insignias con la denominación Hybrid ubicadas en las aletas delanteras y en el portón trasero. Respecto a la anterior gama, los cambios más notorios se encuentran en el frontal, que ofrece unos nuevos faros full LED con luz diurna LED light-guide y cambia el diseño de los paragolpes, la parrilla, el capó y los faros antiniebla. Además, ahora hay unas molduras cromadas que se extienden desde el anagrama de Toyota hacia los grupos ópticos delanteros.

En la zona posterior, Auris presenta unas nuevas ópticas con LED light-guide, un paragolpes de diferente diseño con nuevos catadióptricos y una moldura cromada en su parte inferior. También ha cambiado el diseño de las luces antiniebla y el portón del maletero. A ello se une la nueva antena de equipo de sonido, de tipo ‘aleta de tiburón’.

Interior con mejores acabados

El habitáculo ha sido mejorado incrementado la calidad percibida e incluye un nuevo cuadro de instrumentos con una pantalla TFT de 4,2’’. Además, el diseño del salpicadero, las salidas del sistema de climatización, la zona de la palanca de cambio y los tiradores de apertura de las puertas es diferente. También es novedad la pantalla multimedia de 7’’ que hay en la consola central, que integra unos botones táctiles que, si bien hacen gala de un diseño futurista, no son tan prácticos como unos botones físicos o los típicos mandos giratorios. Lo que sí debería mejorar en Toyota, es la interfaz que utilizan en este tipo de pantallas multifunción.

El interior incorpora nuevos materiales y tapizados, que no suponen una gran mejora respecto al anterior modelo, pero que se sitúan en la media de su segmento. No es que sea un coche que destaque especialmente en este apartado, pero tampoco desentona. El tacto de todos los materiales resulta agradable.

En el puesto de conducción destaca el volante, que tiene un diseño acertado y ofrece un muy buen tacto. Por su parte, los asientos delanteros, sin ser demasiado envolventes, resultan muy confortables.

En las plazas posteriores hay bastante amplitud en longitud y anchura, pero la distancia en altura es algo justa para un adulto de estatura media (1,75 m aproximadamente).

Los 360 litros de capacidad que tiene el maletero, no le sitúa al Auris entre los mejores de su clase –por ejemplo, un Citroën C4 u Honda Civic superan los 400 litros-. Sin embargo, sus formas regulares hacen que podamos aprovecharlo bastante bien. Además, integra una bandeja rígida que nos permite disponer de dos niveles de altura para dejar, si así lo deseas, el piso prácticamente enrasado con la boca de carga y los asientos cuando estos están abatidos. Como es habitual en prácticamente todos los coches, los respaldos de los asientos traseros pueden abatirse con una división 60:40 para conseguir una capacidad de carga que puede llegar a superar los 1.000 litros de volumen. Su volumen es el mismo que las versiones convencionales.

Suavidad y eficiencia

El sistema híbrido está formado por un motor de gasolina VVT-i de 1.8 litros de 99 CV y uno eléctrico de 82 CV, entre ambos la potencia máxima conjunta es de 136 CV. Respecto a la anterior generación, el motor eléctrico tiene mayor protagonismo, ya que tiene más capacidad para actuar solo durante más tiempo –funciona desde el arranque hasta una velocidad de unos 50 km/h-.

El sistema híbrido ofrece cuatro modos de conducción: Normal, EV, Eco y Power. El primero de ellos entra en funcionamiento por defecto cuando arrancamos el coche. El EV (modo 100% eléctrico), no siempre está disponible, ya que depende de la carga de la batería y de otros condicionantes que a nosotros se nos escapan. Sí que es cierto que, siempre que lo tengamos a nuestra disposición, es muy útil cuando nos movemos en un lugar cerrado, o en ciudad a bajas velocidades.

Cuando activamos el modo ECO (el más eficiente) y Power (el que nos permite, en teoría, disfrutar de las mejores prestaciones posibles), no encontramos diferencias apreciables en cuanto a consumo y prestaciones, sobre todo por lo segundo.

El Cambio CVT nos ha dado la sensación que funciona mejor si lo comparamos con el del anterior modelo. Da la impresión que resbala algo menos, aún así, sigue siendo desagradable cuando pisamos a fondo para buscar la mejor aceleración posible; el motor se revoluciona mucho –no hace demasiado ruido- y la aceleración es pobre aunque suficiente para movernos a velocidades normales. Para practicar una conducción comedida y eficiente, el Auris es un buen aliado y la conducción resulta fina y agradable.

En cifras, las prestaciones (acelera de 0 a 100 km/h en 10,9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 180 km/h) son ligeramente inferiores a la nueva versión de gasolina 120 T de 116 CV. Su consumo combinado, según nuestras mediciones, es bajo; llegamos a medir un gasto medio por debajo de los 5,5 l/km, lo que es una muy buena cifra. En ciudad, podemos llegar a obtener medias por debajo de los 4 l/100 km.

Frente a los Auris ‘convencionales’ –al menos la versión 120T que pudimos probar-, la versión híbrida incorpora una suspensión que es algo más firme y no tan suave como la del modelo anteriormente citado. Dinámicamente, aunque sigue siendo un coche estable y fácil de conducir, no llega a los niveles de agilidad y eficacia de la versión 120T. Además, el control de estabilidad es mucho más brusco cuando tiene que actuar.

El tacto del freno, como todos los modelos dotados con este sistema de propulsión, tiene un tacto peculiar, que hace que el ABS entre de una manera demasiado brusca y, además, cuesta algo más de trabajo dosificar la frenada. En condiciones normales, no plantea inconvenientes.

Precio y equipamiento

En el nuevo Auris se puede elegir entre cuatro niveles de equipamiento diferentes: Business, Active, Feel! y Advance. En el caso de la versión probada, asociada al acabado Feel!, su precio es de 19.8500 € (ver todos los precios).

Todas las versiones incluyen mucho equipamiento de serie. En función de la versión, se puede disponer de llantas de aleación de 17” bitono, tapicería mixta piel/Alcantara, asientos calefactables, sensores de luces y lluvia o sistema de aparcamiento inteligente —Simple Intelligent Park Assist (SIPA)—, entre otros elementos. La nueva gama Auris incluye dos nuevos colores para la carrocería: Azul Denim y Azul Marino.

Entre las nuevas opciones de equipamiento destaca Toyota Safety Sense, un conjunto de sistemas de seguridad y ayuda a la conducción. Incluye Control Inteligente de Luces de Carretera, Reconocimiento de Señales de Tráfico, Avisador de Cambio Involuntario de Carril y Sistema de Seguridad Precolisión.

Nuestra conclusión:

La versión híbrida del compacto de Toyota sigue siendo muy recomendable si buscas un modelo de este tipo. En ciudad es todo un ganador, gracias a su suavidad de marcha y, lo que es más importante, su bajo consumo y nivel de emisiones contaminantes. Por lo demás, es un coche muy satisfactorio que sale bien parado en todos sus apartados.