
Así, el Mazda 2, obtendría según estos datos, una de las mejores puntuaciones, situándose en segundo lugar dentro de su segmento, únicamente por detrás del Volkswagen Polo. Equipado con el motor 1.3 litros de gasolina, el modelo lograría conservar un valor del 43,10% a 36 meses o 20.000 kilómetros y del 34,90% a los 48 meses. Por su parte, la variante 1.6 diesel de 95 CV de potencia del Mazda 2 obtendría unos valores residuales de 46, 50% y 38,60% a 36 y 48 meses, respectivamente.
El Mazda 3, por su parte, lograría hacerse con el segundo mejor valor residual dentro del segmento de los compactos, equipado con su motorización gasolina de 1.6 litros y 105 CV de potencia, alcanzando una retención del 44% a 36 meses. Al mismo tiempo, equipado con el propulsor 1.6 litros diesel, el modelo lograría la tercera plaza tanto a 36 como a 48 meses, con un porcentaje del 48,70% y del 41,20 %, respectivamente
La berlina Mazda 6 también se haría con el segundo puesto de su segmento, quedando únicamente por detrás del Volkswagen Passat. Así, equipado con la motorización de gasolina de 1.8 litros, el valor ascendería al 42.60% tras 36 meses, mientras que la versión diesel 2.2 litros de 163 CV se quedaría con un valor del 48,2% en ese mismo periodo de tiempo.
El Mazda CX-7 diesel 2.2 l. 173 CV lograría por su parte, alzarse en el tercer puesto del ranking de todocaminos a 36 y 48 meses situándose a muy corta distancia del VW Tiguan y del Toyota RAV-4. Asimismo, el Mazda 5 también se situaría entre los tres monovolumentes con mayor valor residual, situándose por detrás del VW Touran y Ford C-Max.