Prueba del Subaru BRZ 2017

Mejora en agrado de conducción y comportamiento dinámico.

El Subaru BRZ es un deportivo coupé 2+2 que cuenta con un motor bóxer de 200 CV. Dese el pasado mes de febrero está disponible en los concesionarios. Se puede adquirir desde 29.650 euros (ver todos los precios).

El nuevo modelo incorpora una serie de mejoras que afectan a su diseño exterior, bastidor, interior, equipamiento y motor. Todos los cambios efectuados suponen una mejora que hacen que este coche sea más efectivo, confortable y agradable de conducir.

Los cambios en el diseño exterior principales son: las nuevas ópticas delanteras full led incluyendo los antiniebla delanteros, las luces diurnas led, el paragolpes delantero rediseñado que permite una mejor refrigeración del motor, las nuevas llantas de aleación de 17 pulgadas, las nuevas ópticas traseras full led con intermitentes que se activan en caso de una frenada de emergencia, el nuevo alerón posterior de aluminio tipo pedestal acabado en negro mate que ofrece mejor aerodinámica, y las rediseñadas branquias laterales. Todas estas mejoras permiten que el coche tenga un aspecto más atractivo, sobre todo los pilotos traseros y el nuevo alerón posterior.

En su interior también ha cambios. Ahora, el BRZ incorpora un nuevo volante multifunción más grueso, de menor diámetro y forrado en cuero de mayor calidad, nuevos diales rediseñados con una nueva pantalla LCD de 4,2 pulgadas a color integrada, que incluye novedosas funciones como el monitor del rendimiento del motor, el cronógrafo para medir tiempos por vuelta y el monitor de fuerzas G. También muestra los niveles de temperatura del aceite, del agua y el voltaje de la batería, así como las funciones clásicas de un ordenador de a bordo.

Las novedades interiores afectan a la calidad y diseño de diversos elementos: asientos de cuero y alcántara con logo de BRZ bordado, paneles de puertas, salpicadero central, apoyabrazos y altavoces mejorados, botonera de las puertas y panel de climatización con look fibra de carbono, panel del sistema
multimedia acabado en plástico negro piano, y mandos de climatización rediseñados.

El sistema de audio es nuevo y, al igual que el resto de la gama Subaru, se maneja a través de una pantalla de 6,2 pulgadas. Además, también ofrece mejor, conectividad, sonido y recepción de radio y está mejor integrado en el salpicadero. El manejo del mismo es más intuitivo y ofrece, por primera vez, la posibilidad de manejar sus funciones básicas desde el volante o por medio del sistema de reconocimiento de voz. No obstante, pese a estas mejoras, el sistema multifunción y la conectividad nos siguen pareciendo lentos a la hora de procesar la información.

El interior sigue transmitiendo una gran sensación de calidad, no porque los materiales sean especialmente lujosos, sino por la solidez y el buen ensamblaje de todas las piezas. La postura al volante sigue siendo sobresaliente, pues todo está situado perfectamente diseñado para que nos encontramos cómodos y manejemos a la perfección todos los mandos de control. Los asientos merecen una mención especial, ya que ofrecen un confort, ergonomía y calidad de fabricación (están muy bien fabricados y el tapizado de piel y Alcántara es de calidad).

Chasis y motor mejorados

Su motor bóxer atmosférico de inyección directa, que mantiene 200 caballos de potencia máxima, ofrece una respuesta y elasticidad mejoradas. El bloque motor es más rígido e incluye nuevas válvulas, pistones, cigüeñal, árbol de levas y bomba de combustible. Aun así, nosotros apenas encontramos cambios respecto al anterior motor en cuanto a rendimiento se refiere -sí que nos ha dado la sensación que transmite menos ruido al interior, aunque esto también puede deberse a la incorporación de mayor material aislante-.

Aunque es un motor que tiene su encanto, nos sigue pareciendo lo peor del coche. Sin duda, un motor tradicional sobrealimentado de gasolina de 2.0 litros de cilindrada le hubiera venido mejor a un coche de este tipo, pues sigue siendo una motorización con un margen de utilización muy limitado cuando se intenta buscar la máxima aceleración posible. Cuando nos movemos a regímenes muy moderados, es una mecánica que le cuesta caer de vueltas cuando cambiamos de marcha, como si llevara un volante motor muy pesado.

Lo que sí que nos ha parecido que ha mejorado, es el tacto que ofrece este coche al conducirlo. Los pedales y el cambio ofrecen un tacto preciso sólido y extremadamente agradable, algo que es difícil de encontrar en un coche moderno, incluso en la mayoría de un precio muy superior.

El consumo homologado se ha reducido en 0,1 litros hasta los 6,3, y las emisiones se reducen 1 gramo en ciclo combinado hasta los 180 por kilómetro y en 2 gramos hasta los 146 en carretera. Según nuestras mediciones, el BRZ consumió en carretera, practicando una conducción normal, una media de 6,7 litros a los 100 kilómetros, lo que es una muy buena cifra teniendo en cuenta la potencia y la cilindrada del motor.

Las mejoras del deportivo de Subaru afectan también a la suspensión, que ofrece un mayor compromiso entre deportividad y confort, así como mayor estabilidad. Esta mejora se ha obtenido gracias a la puesta a punto de muelles y amortiguadores y de otra serie de elementos de la suspensión. Además, se han reforzado determinadas zonas clave del chasis y mejorado la insonorización, con la finalidad de ofrecer un menor nivel de vibraciones y ruido. La deportiva línea de escape de doble salida también se ha rediseñado con una mayor calidad de fabricación para optimizar su rendimiento.

Otra de las funciones destacables que añade el nuevo BRZ es la nueva la función Track, que permite desconectar completamente los controles de tracción y estabilidad. Adicionalmente, el BRZ incorpora por vez primera el sistema Hill Start Assist ya conocido en otros modelos de Subaru, que facilita la puesta en marcha del vehículo desde parado en pendientes. Los 6 airbags del nuevo BRZ han sido mejorados y, los sensores que los activan, son nuevos y han sido reubicados para actuar con mayor rapidez en caso de accidente.

Con todas estas mejoras, el BRZ ofrece un rodar más refinado y una suspensión que es capaz de absorber mucho mejor las imperfecciones del firme. Además, es un coche que ha ganado claramente en estabilidad; ahora es mucho más efectivo en curva media y rápida, y sus reacciones cuando se descoloca la trasera son
mucho más progresivas y predecibles. Anteriormente, era un coche mucho más brusco y crítico a la hora de sobrevirar o en un apoyo a altas velocidades.

Los frenos, además de ofrecer un tacto de pedal extraordinario, son potentes en las frenadas más agresivas y aguantan mucho en uso intensivo.

Si hablamos de precios y equipamiento, el BRZ 2017 ya está a la venta partiendo desde los 29.650 euros para el acabado Sport manual y 31.150€ para el Executive con cambio manual. Este último añade asientos de cuero y alcántara. Por último, como novedad en 2017, se añade el acabado Executive asociado a una caja de cambios automática de 6 marchas y convertidor de par con levas en el volante, por un precio de 32.650 euros. Los precios incluyen una campaña comercial de 1.250 euros. La pintura metalizada, cuyo precio es de 550 € salvo en el color Pure Red, es opcional. Aquí puedes consultar todos los precios.

Nuestra conclusión:

El Subaru BRZ sigue siendo un coche muy especial que es muy recomendable para aquellos conductores que quieran un deportivo para ir muy pegados al suelo. Las mejoras que ha recibido, le permiten al modelo japonés ganar en agrado de conducción y comportamiento dinámico. Ahora, estamos ante un deportivo más efectivo que te encantará conducir.