Prueba del SEAT Arona 1.0 TSI DSG 110 CV Xcellence

EXTERIOR

La carrocería del SEAT Arona destaca por los faros y pilotos traseros de formas triangulares y tecnología LED. Asimismo, dispone de una gran cantidad de opciones de personalización, con hasta 10 colores disponibles, además de la posibilidad de combinarlo con otro tono diferente para el techo -color bitono con hasta tres opciones a elegir: Gris, Naranja y Negro-. En total hay 68 posibles combinaciones de colores. Además, en el pilar C destaca el gráfico en ‘X’ grabado en el lateral para remarcar el aspecto crossover.

Generosa altura libre al suelo para afrontar rampas y badenes

Si hablamos de las dimensiones, el SEAT Arona ofrece un espacio interior inimaginable. 4.138 mm de longitud, 1.780 mm de ancho y 1.552 mm de alto (contando las barras del techo), donde destaca una considerable altura libre al suelo que, en consecuencia, hacen del nuevo crossover de la marca española, una opción perfecta para poder aventurarse fuera del asfalto, así como facilitar la entrada y salida al habitáculo.

Su altura marca la diferencia

El Arona no solo ofrece una mayor altura libre al suelo para poder aventurarse fuera del asfalto, sino que, además, mejora todavía más el espacio para la cabeza tanto en las plazas delanteras como en las traseras.

INTERIOR

Gracias a su generosa distancia al suelo (19 cm), la entrada y salida del habitáculo se realiza con comodidad. Una vez dentro, uno tiene la sensación que se encuentra en un coche de mayor tamaño. Buen ejemplo de ello son los 143 mm de anchura en las plazas delanteras, y los 140 mm de las traseras. Además, la altura libre al suelo es de 106 cm delante y 99 cm detrás, tal y como hemos apuntado con anterioridad.

Postura de conducción sobreelevada

La banqueta de los asientos está 52 mm más elevada, lo que aporta una doble ventaja. Primero, una posición de conducción más alta para mejorar la sensación de control del tráfico y, segundo, facilita enormemente la accesibilidad para entrar y salir del coche. Del mismo modo, la suspensión eleva la carrocería 15 mm más que en el Ibiza y el parabrisas es ligeramente más vertical para ganar espacio en altura dentro del habitáculo.

Los asientos son muy confortables; sujetan el cuerpo adecuadamente, transmiten calidad y están recubiertos con un buen tapizado de símil piel y Alcántara que no se suelen encontrar ni en modelos del segmento C. Tan sólo nos gustaría que los reposacabezas contaran con más regulaciones -no sólo en altura- para que quedaran más cerca de la cabeza y en el punto óptimo. A su favor, nos ha encantado su mullido blando, que suma mucho para incrementar el confort de manera considerable -la mayoría de las marcas deberían tomar nota-. Los asientos traseros, que puede que sean algo planos y con la banqueta corta, también nos han parecido muy confortables. Tanto es así, que es, muy probablemente, el mejor modelo de la categoría en este sentido. Asimismo, nos gustaría destacar los reposacabezas de los asientos posteriores, que quedan muy cerca de la cabeza y que, a diferencia de la inmensa mayoría de sus oponentes y al igual que los asientos delanteros, cuentan con un mullido blando que resulta muy confortable.

Gracias a su generosa distancia al suelo (19 cm), la entrada y salida del habitáculo se realiza con comodidad. Una vez dentro, uno tiene la sensación que se encuentra en un coche de mayor tamaño.

Cómodo, amplio y muy práctico

Analizado desde las plazas delanteras y, sobre todo, la del conductor, el Arona es un modelo muy práctico. Cuenta con los compartimentos justos y necesarios, y no hay pegas en cuanto a su ubicación, capacidad y acceso. En las plazas posteriores, no hay salidas de ventilación, ni apoyabrazos en la plaza central y ni tomas USB.

El puesto de conducción está muy logrado para que vayamos cómodos desde el primer momento. Además de la variedad de reglajes en el asiento y volante, todos los mandos están muy bien ubicados. También nos ha gustando mucho la sencillez y la ubicación de todos los mandos; todo está donde tiene que estar y funciona perfectamente.

Cuadro de instrumentos completamente digitalizado

Desde 2018, el Ahora, al igual que el Ibiza, dispone de una nueva instrumentación virtual que se muestra en una pantalla de 26 cm (10,25"). Se puede personalizar, tiene tres diseños diferentes (clásica, digital y dinámica) y ofrece una resolución de bastante calidad. En función de la vista elegida, varía la información que muestra. Entre todo lo que podemos visualizar, además, como es lógico, del velocímetro y el tacómetro, se puede ver la navegación o el funcionamiento de los asistentes a la conducción.

En cuanto a conectividad, debajo de la consola central hay un hueco suficientemente amplio para poder dejar el Smartphone y cargarlo por inducción. Todo está recubierto con un fondo de goma y encontramos dos tomas USB de tipo C.

Mención especial también merece el equipo de sonido, que está firmado por la división de productos de audio de Apple, Beats Electronics, Utiliza un procesador de señal digital (DPS), 7 altavoces premium y un amplificador de 8 canales con 300W. El sonido es limpio, potente y de bastante calidad. También nos gustó la pantalla multifunción de 8 pulgadas que cuenta con una resolución, interfaz y funcionamiento realmente buenos.

Maletero capaz y práctico

El maletero, que tiene una capacidad de 400 litros, es tremendamente práctico. Equipa cuatro argollas metálicas para sujetar la carga y un doble fondo que deja siempre una superficie completamente plana, incluso cuando se abaten los asientos posteriores. Debajo del fondo plano hay espacio para dejar una rueda de repuesto.

Sencillez con un buen acabado

Todos los materiales del interior son sencillos. Hay zonas ligeramente acolchadas en los apoyabrazos de las puertas y en la parte más visible del salpicadero. El resto de los plásticos son rígidos y, pese a ser sencillos, presentan un acabado bastante cuidado.

SISTEMA DE PROPULSIÓN

Nuestra unidad de pruebas equipaba el motor intermedio que ofrece actualmente la gama. Es un gasolina con un bloque de tres cilindros (1.0 TSI) que entrega una potencia de 110 CV. Por funcionamiento y prestaciones cumple más que de sobra para todo tipo de usos, ya sea para circular por ciudad como por carretera. Bien es cierto que, como todos los motores de este tipo de arquitectura con una baja cilindrada, no son los motores más agradables de utilizar ni los más refinados. No obstante, si optas por la opción con cambio automático de 7 velocidades, encontrarás una versión mucho más agradable de conducir. El cambio DSG de doble embrague del Grupo Volkswagen siempre es una garantía en todos los sentidos; es rápido, responde con refinamiento en las transiciones y aporta mucha más diversión al volante que la versión manual equivalente. Tan sólo, por criticar algo, nos hubiera gustado que el volante integrara levas.

El maletero, que tiene una capacidad de 400 litros, es tremendamente práctico. Equipa cuatro argollas metálicas para sujetar la carga y un doble fondo que deja siempre una superficie completamente plana.

Consumo que varía mucho en función del tipo de conducción

Este tipo de motorizaciones, que suelen ser algo sensibles en cuanto a consumo se refiere, en cierto modo nos obligan a conducir de manera eficiente. En función del tipo de uso que hagamos, la media puede variar considerablemente. No es un motor que tenga una tendencia a consumir poco, pero a poco que seamos cuidadosos, los registros pueden ser asumibles. En nuestro caso, hemos tenido mediciones muy distantes; desde pomo más de 5,2 litros a los 100 kilómetros hasta casi 7,9 litros.

COMPORTAMIENTO DINÁMICO

El SEAT Arona es buen urbano que resulta muy agradable de conducir por varios motivos: tiene una dirección precisa, comunicativa y lo suficiente asistida como para que se maneje con poco esfuerzo sin perder feeling con el coche; el volante es muy bueno por tamaño y grosor; y la suspensión tiene un muy buen balance entre confort y estabilidad, aunque nos hubiera gustado que fuera menos seca cuando pasa por encima de un bache. En ciudad es un coche que se sigue conduciendo con suavidad y facilidad, gracias a su magnífica maniobrabilidad y a la posición dominante al volante, que nos permite tener mejor visibilidad.

Los frenos nos han gustado por su potente frenada. Del mismo modo, el funcionamiento del ABS no es muy intrusivo y presenta bastante resistencia a la fatiga.