El Scout estrena motor de gasolina

El 1.8 TSI de 160 caballos sustituye al 2.0 FSI de 150 CV

Hay novedades en la gama del Skoda Scout. Este modelo es una versión del Octavia Combi pero que ha recibido ciertas modificaciones que le permiten circular con relativa facilidad fuera de carreteras asfaltadas.

Existe una versión de gasolina con un motor de 150 caballos y una diesel de 140 CV. Pero desde este mes, el propulsor 2.0 FSI queda sustituido por el 1.8 TSI de 160 caballos con tracción 4x4 y asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades.

La nueva mecánica mejora a su antecesora. Así, el Scout con el nuevo motor acelera de 0 a 100 en 8,4 segundos frente a los 10 segundos que tardaba con el motor 2.0 FSI. La velocidad máxima es de 211 km/h (200 km/h para el anterior motor) y el consumo medio baja de 8,7 litros por cada 100 kilómetros recorridos a los 7,8 del nuevo TSI. Lo que también baja mucho son las emisiones medias de CO2, que pasan de ser de 204 gramos por kilómetro a 182.

También hay cambios en el equipamiento de serie de este modelo de Skoda, que ahora incluye los reposacabezas delanteros activos y una nueva radio CD con MP3. Con esto se completa el único acabado con el que se vende el Scout y que también lleva llantas de 17 pulgadas, climatizador bi-zona, control de estabilidad, sensor de lluvia o un sistema de ayuda de ascenso en pendientes, entre otros elementos.

En cuanto al precio, la nueva versión de gasolina está a la venta desde 28.200 euros; es 240 euros más cara que el Scout al que sustituye. La versión diesel se comercializa a partir de 28.610 euros.