El futuro de los concesionarios "mono-marca"

En unos años tenderán a agruparse en grupos o a abandonar la venta.

Actualmente hay muchos concesionarios más o menos pequeños pero que se encargan de vender coches de una única marca. Actualmente también, la gente tiende cada vez más a comprar menos coches nuevos. En las grandes ciudades se nota pero todavía no se echan las manos a la cabeza. En las ciudades pequeñas es otra cosa. ¿Qué pasaría si alguna marca desaparece? Cuando hace pocos años MG y Rover quebraron, muchos concesionarios que vendían exclusivamente vehículos de estas marcas tuvieron que cerrar o cambiar de Marca. Y hoy en día los empresarios que apuestan por la venta de vehículos tienen que minimizar los riesgos.

Por ello, está empezando a ser una práctica habitual que los concesionarios compartan instalaciones, en vez de alquilar dos lonjas y contratar a dos grupos de comerciales para diferenciar bien ambas marcas se aprovecha el mismo espacio. Siguen siendo concesionarios oficiales e independientes el uno del otro pero están bajo el mismo techo. Perfectamente diferenciados pero en el mismo sitio.

En Madrid también empieza a ser más o menos normal agrupar varias marcas. Y no marcas del mismo grupo (como Audi y Volkswagen ). Puede que un empresario posea una marca japonesa, otra alemana y una italiana.

Por todo esto, lo lógico es que en un futuro cercano podamos encontrar distintas marcas en un mismo espacio propiedad un mismo empresario. Para ello los fabricantes automovilísticos tendrán que empezar a "aflojar" un poco las exigencias con sus concesionarios en estándares de calidad. No en el sentido de que sean establecimientos menos cuidados, sino en el de compartir espacio y abrirse a tener la competencia en la misma lonja.

Los dueños de los concesionarios también tendrán que empezar a plantearse agruparse con otros más cercanos, sobre todo en ciudades con menos habitantes y, por lo tanto, con menos demanda de coches, o desestimar la venta y centrarse en ser un servicio oficial de reparación multimarca. A fin de cuentas, los ingresos de un concesionario pasan por las ventas de vehículos nuevos, por las de vehículos de ocasión y, en el caso de tenerlo, de los talleres de reparación oficiales.