Prueba del Volkswagen Passat 2.0 TDI 150 CV DSG

La octava generación de la berlina germana entra en escena para situarse como la referencia de su categoría.

Con la octava generación del Passat, Volkswagen vuelve a demostrar que es una marca de referencia en el sector del automóvil. La nueva berlina alemana es un vehículo que no tiene puntos débiles y cumple con brillantez en todos sus apartados. Nosotros probamos la versión diésel de 150 CV asociada al cambio automático DSG, probablemente una de las más equilibradas de la gama.

A pesar de que la longitud del nuevo Passat es casi idéntica a la del modelo anterior, las batallas son 79 mm más largas. Asimismo, las ruedas delanteras y traseras aumentan su tamaño y se desplazan más hacia afuera. A su vez, se acortan significantemente los voladizos de la carrocería. El Passat es ahora más bajo y ancho. La gama está compuesta  por dos carrocerías; berlina de cuatro puertas y familiar (denominada comercialmente como Variant).

Centrándonos en la berlina, que es la carrocería que hemos tenido el placer de probar, hay que decir que tiene una longitud real de 4.767 mm, siendo 2 mm más corta que la del modelo anterior. Al mismo tiempo, aumenta la longitud de batalla en 79 mm a 2.791 mm.

Respecto a otros modelos de la competencia, el Passat ofrece un acabado impecable en la fabricación de la carrocería. No sólo los ajustes de las diferentes piezas rozan la perfección, sino que el acabado de la pintura también está a un gran nivel, siendo un coche que transmite solidez y calidad.

Estas mismas sensaciones se trasladan al interior. Como buen Volkswagen que se precie, destaca la sobriedad por encima de todo. También la calidad de los materiales y los diferentes ajustes, que son sobresalientes, y más teniendo el precio del coche. El puesto de conducción es, sencillamente, impecable, el asiento permite que podamos ir bajos, si así lo deseamos, y los diferentes reglajes permiten que podamos sentirnos muy integrados con los mandos.

Volkswagen lanza al mercado, por primera vez, a bordo del Passat un cuadro de instrumentos en forma de pantalla con representaciones interactivas denominado «Volkswagen Digital Cockpit». Todos los instrumentos se realizan de forma virtual a través de un software. Los únicos elementos hardware disponibles son las luces de control relevantes para la seguridad.

La información puede representarse en 2D y 3D en la pantalla de 12,3 pulgadas. La resolución de 1.440 x 540 píxel proporciona una representación gráfica interactiva de todos los detalles extremadamente precisa y de gran calidad. Ejemplo «Modo de navegación»: el tacómetro y el cuentarrevoluciones se desplazan al extremo para proporcionarle mayor espacio al mapa. Si es necesario, existe también la posibilidad de integrar información adicional relativa a las funciones de conducción, navegación y asistencia en las superficies gráficas del tacómetro y del cuentarrevoluciones.

Los datos representables en la consola central a través del sistema de infoentretenimiento como las fotografías de los contactos del teléfono o las carátulas de CDs pueden integrarse también en la pantalla «Volkswagen Digital Cockpit» del Passat. Volkswagen ofrecerá la pantalla «Volkswagen Digital Cockpit» como alternativa a los instrumentos analógicos de serie u opcionalmente en función de la versión del modelo.

Para completar toda la información que puede recibir el conductor, el nuevo Passat es el primer Volkswagen que equipa la pantalla de visualización frontal «Head-up-Display», que proyecta información importante como los pictogramas de la velocidad o de navegación directamente en el campo visual primario del conductor. Gracias a la proyección de la pantalla «Head-up-Display», los ojos del conductor permanecen en la carretera mientras registra datos como el de la velocidad. A través de la proyección de señales de advertencia en el campo visual directo del conductor puede acortarse notablemente el tiempo de reacción.

Con todo esté menú tecnológico, accedemos a mucha más información y lo hacemos de una manera intuitiva y muy fácil.

Gracias al estreno de la nueva Plataforma Modular Transversal (MQB), Volkswagen ha podido mejorar el espacio disponible en el interior. Pese a que la carrocería del nuevo Passat es 2 mm más corta que la del modelo anterior, la longitud del habitáculo ha aumentado 33 mm. Por su parte, el maletero incrementa su volumen de carga, que en el caso de la berlina es 6 litros más capaz que el del modelo precedente. Gracias a ello, ahora podemos disponer de 586 litros.

Dentro de la amplia gama mecánica que ofrece este modelo, nos hemos decantado por una de las más equilibradas y, probablemente, también una de las más vendidas. Estamos hablando del 2.0 TDI de 150 CV acoplado al cambio automático de doble embrague DSG. Si optas por esta variante, no te equivocarás, ya que el equilibrio entre funcionamiento, rendimiento y consumo, rozan la perfección. En cuanto a prestaciones se refiere, es un motor que responde con brío y que no resulta ruidoso aunque gire a un régimen elevado. El cambio automático es muy recomendable, ya que aporta un plus de confort a la conducción, y no resta diversión al volante en ningún caso.

El Consumo de carburante sobresale por encima de todo. Según nuestras mediciones y realizando una conducción tranquila y legal por carretera, obtuvimos 5,5 litros a los 100 kilómetros de media.

Si el motor es un buen aliado para encontrar un coche más que satisfactorio, el chasis no se queda atrás ni mucho menos. En el caso de nuestra unidad de pruebas, que equipaba la suspensión adaptativa DCC , que permite rebajar la altura de la carrocería en 100 mm respecto al suelo, el resultado es nuevamente sobresaliente. El nuevo Passat hereda y mejora las buenas maneras de sus predecesores, que siempre se han mostrado como vehículos nobles de reacciones, muy estables, seguros y con un tacto de conducción francamente refinado.

Si hablamos de equipamiento, el Passat es de los modelos con mayores posibilidades de equipamiento dentro de su categoría. Por este motivo, dispone de las últimas tecnologías, como sistemas como la pantalla Active Info (un panel de instrumentos completamente digital), la pantalla superior extensible, el Rear Seat Entertainment basado en una app para tabletas y el Front Assist con Freno de Emergencia en Ciudad y Control de Peatones. Además, el modelo estrena mundialmente otros tres sistemas: Emergency Assist (el vehículo se para en caso de emergencia), Trailer Assist (asistente de maniobras con remolque) y Traffic Jam Assist.

La unidad que hemos podido probar está disponible desde 35.440 euros (ver todos los precios).

Nuestra conclusión:

El nuevo Volkswagen Passat ha entrado con mucha fuerza dentro de su categoría para posicionarse como una referencia dentro de la misma. Se trata de un coche amplio, confortable, práctico, avanzado, seguro, equipado, bien construido y con una gama de motores que marca la diferencia respecto a sus competidores. La versión diésel de 150 CV resulta muy equilibrada para encontrar un coche más económico, más que competente en cuanto a prestaciones se refiere y con un consumo de carburante muy bajo.