PRUEBAS DE VEHÍCULOS
12/11/2016
Por Gustavo Rodríguez Hernandez
Prueba del Renault Mégane Sport Tourer
Conducimos la versión Diesel de 110 CV, que ofrece un excelente balance entre consumo y prestaciones.
Probamos la segunda carrocería del Renault Mégane, que responde a la denominación comercial Sport Tourer. Se trata de un modelo de corte familiar con un habitáculo de cinco plazas. La unidad que tuvimos la ocasión de conducir y analizar, es la diésel de 110 CV asociada al acabado más alta de la gama (Bose). Aquí puedes consultar todos los precios.A diferencia del modelo precedente, el actual cuenta con un aspecto mucho más deportivo, algo que puede resultar más atractivo para su potencial clientela. Su diseño es muy similar a la versión de cinco puertas -tan sólo cambia la parte trasera que, al igual que el hermano de gama, mantiene los pilotos traseros alargados, algo que ya comienza a ser una seña de identidad de la marca-.
Por dentro, el nuevo Mégane nada tiene que ver con su predecesor. No sólo es más amplio, algo que se nota desde el primer momento, sino que también ofrece un cambio de diseño profundo muy en la línea de los nuevos modelos de Renault. Otro de los puntos en los que también evoluciona, es el que afecta a los acabados y calidad del interior, que también le permite superar con creces a la anterior generación.
Práctico y amplio
Tal y como cabe esperar en un vehículo de estas características, el maletero tiene una capacidad destacable. En el caso del modelo que nos ocupa, el volumen disponible es de 580 litros, una cifra equivalente al de su antecesor. Pero no solo disponemos de mucho espacio, también hay una serie de soluciones prácticas que permiten sujetar mucho mejor la carga. Además, hay compartimentos que nos permiten guardar pequeños objetos para que éstos no queden a la vista, ni para que se muevan sin control cuando estamos en movimiento.
Otro punto importante en un coche de este tipo, es la habitabilidad interior. En el caso de este Mégane, también estamos ante un coche más que solvente. A diferencia de la versión de cinco plazas, la Sport Tourer cuenta con una batalla cuatro centímetros más larga. De este modo, las plazas traseras disponen de mayor espacio en longitud para que las piernas cuenten con mayor espacio.
El puesto de conducción está muy bien configurado, ya que, tanto el asiento como el volante, cuentan con amplios reglajes en altura y profundidad. No obstante, los asientos, que parecen bastante sólidos y bien acabados, no nos han terminado de convencer en cuanto a ergonomía se refiere. Aunque a simple vista resulten bastante envolventes, en el fondo no sujetan demasiado bien el cuerpo; el respaldo resulta demasiado plano y la zona lumbar no se ajusta correctamente, al menos en nuestro caso.
Para terminar con lo que plantea el nuevo Mégane en su interior, no debemos olvidar lo que ofrecía nuestra unidad de pruebas; el sistema R-LINK 2 y su pantalla vertical de 8,7 pulgadas (22 cm), idéntica a la del nuevo Espace y de Talisman. En este sentido, el compacto francés, es único de su segmento en ofrecer una pantalla capacitiva que ofrece una sensación táctil similar a la de un smartphone o de una tablet. El R-LINK 2 está equipado con reconocimiento de voz para la navegación, el teléfono, las aplicaciones y la radio, para un acceso más sencillo y seguro a las funciones.
Un buen motor para consumir lo menos posible
Una vez que arrancamos, notamos que el pequeño dCi de 110 CV suena muy poco y funciona con refinamiento. Pero esto no sólo se percibe al ralentí, también se reproduce cuando nos ponemos en movimiento. En ese tipo de condiciones, todas las vibraciones que genera la mecánica están perfectamente aisladas –tan sólo notamos un hormigueo en el embrague-. Todo esto permite que el Mégane sea un coche muy confortable.
Al igual que muchos de sus rivales, el nuevo Mégane ofrece cinco modos de conducción (Neutral, Eco, Confort, Sport y Personal). Se pueden gestionar desde la pantalla multifunción y permiten endurecer la dirección, mejorar la respuesta del motor, modificar el diseño del panel de instrumentos y consumir menos carburante si optamos por el modo ‘Eco’. Precisamente, si hablamos de consumo, el Mégane se sitúa entre las mejores opciones de su segmento. Según nuestras mediciones, la unidad de pruebas que pudimos testar consiguió un consumo medio que puede llegar a situarse sobre los 4,6 litros a los 100 kilómetros. Sin duda, un gran dato.
En marcha, el Mégane sigue siendo un coche muy equilibrado en cuanto a confort y estabilidad. La sensación de seguridad está presente en todo tipo de condiciones y, además, es un coche muy ágil tanto en curva como en ciudad. Para conseguir un buen nivel de confort, la calidad de rodadura también aporta su granito de arena para situar al Mégane entre los mejores de su categoría.
El nuevo Renault Mégane es uno de los coches más avanzados de su segmento, buena prueba de ello es todo el equipamiento que es capaz de ofrecer, sobre todo en cuanto a ayudas de conducción se refiere. Entre lo más destacable, cabe reseñar el regulador de velocidad adaptativo, el sistema de frenada emergencia asistida, la alerta por cambio involuntario de carril, la alerta de distancia de seguridad, la alerta de exceso de velocidad con reconocimiento de las señales de tráfico, el detector de ángulo muerto, la cámara de visión trasera, el cambio automático de luces largas/cortas, la ayuda al aparcamiento delantera, trasera y lateral, el sistema parking manos libres, y la tecnología 4Control que es el equipamiento estrella y que no lo pudimos probar en nuestra unidad de pruebas
Nuestra conclusión
Con la entrada en escena de la cuarta generación del Renault Mégane, la versión familiar también da un gran paso adelante para ofrecer más confort, equipamiento y dinamismo. Su diseño también es una de sus grandes bazas, ya que gana en atractivo pese a tratarse de un break. La versión Diesel de 110 CV resulta muy recomendable si necesitas un modelo de bajo consumo, además de unas prestaciones destacables.
GUSTAVO RODRÍGUEZ HERNANDEZ
Periodista especializado con 20 años de experiencia en el sector de la automoción. Fue director del área de Motor de Cadena Cope Castilla y León durante 3 años. Posteriormente, fue redactor y probador de coches en AUTOhebdo Sport, Revista Top Auto y sobrecoches.com. Desde el año 2011, es el responsable de pruebas y producto de cochesyconcesionarios.com
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COMENTARIOS ( 2 )
Muy bonita
Excelente vehículo. Muy similar a su hermano mayor el Talismán, francamente, no veo motivo para dar el salto a un segmento superior. Como en otros ámbitos diferentes al mundo del automóvil, los fabricantes se están poniendo las pilas para ofrecer una gama media atractiva y solvente. Buen trabajo Renault!!