Entran en vigor nuevas normas de seguridad comunitarias

COn el objetivo de reducir el numero de victimas en carretera

Desde comienzos del mes de noviembre estará vigente un nuevo reglamento comunitario de seguridad, adoptado en 2009,  que afectará a  los nuevos vehículos que salgan al mercado y a todos los nuevos vehículos vendidos en el mercado comunitario en 2014 e incorporará nuevas normas que reforzarán la seguridad a bordo de los vehículos.

Entre las novedades más destacadas en este nuevo reglamento se incluyen la incorporación de sistemas obligatorios de alerta visual o auditiva de olvido del cinturón en el asiento del conductor, y de al menos dos puntos de anclaje más sencillos para los asientos infantiles Isofix en la parte trasera de los vehículos. Además los coches deberán llevar una etiqueta  que advierta contra la colocación de dispositivos de retención de niños orientados hacia atrás en un asiento protegido por un airbag frontal activo.

Asimismo, este nuevo reglamento introduce nuevos requisitos de seguridad para los modelos eléctricos, que garanticen que los usuarios no reciban ninguna descarga eléctrica procedente de las piezas del vehículo o del propio motor.

Por otra parte, el nuevo reglamento incluye nuevas normas para evitar el desplazamiento del equipaje en caso de accidente y obliga a proveer a los neumáticos de los vehículos de un sistema de control de la presión a bordo, que evitará en gran medida los reventones. Con estas nuevas norma, el Ejecutivo comunitario confía en disminuir en un 50% el número de víctimas de carretera respecto a 2010.

Por otro lado, el1 de noviembre entraron también en vigor las nuevas normas comunitarias sobre etiquetado de los neumáticos, que ofrecerán a partir de ahora, información clara y fácil de entender sobre tres aspectos esenciales en términos de eficiencia energética, agarre en suelo mojado o ruido externo. Además, los modelos  estarán clasificados en una escala desde la peor 'G' hasta la mejor, 'A'.

Con esta normativa se espera contribuir al ahorro energético y de costes de combustible, reducir las emisiones de C02 del sector y la dependencia del petróleo, así como alentar la competencia en la industria.